Un emprendedor: Es toda aquella persona que inicia un negocio o empresa innovadora. Y un inversor o inversionista: Es aquella persona que coloca o invierte únicamente su dinero en un “x” negocio ya establecido.
Si bien es cierto, ambos términos tienen conceptos diferentes, lo que los une es la generación de ganancias que se obtiene al optar por uno de ellos. Ahora, si hablamos sobre las características de un emprendedor, podemos resaltar lo siguiente: Su Valentía en correr riesgos, son personas tenaces y muy decisivas. Sabemos que enfrentarse a un mundo dónde el mercado es cambiante y la competencia es reñida, no es fácil.
Por eso, entre otras cualidades que debe tener un emprendedor es la Humildad. ¡Si, la humildad! Para reconocer que no lo sabe todo, que necesita asesorarse por profesionales; estar abierto a sugerencias y críticas constructivas. Sobre todo, estar en constante preparación y estudio
¿TE HAS PREGUNTADO SI ES NECESARIO TENER CAPITAL PARA INVERTIR?
¿Emprender o invertir? Ese es el dilema. ¿Innovar o ir a lo seguro? Es una pregunta que muchas veces ronda nuestras cabezas, pero, partamos desde el inicio. Hoy en día existen muchas empresas que te dan opciones de cómo invertir, y muchas veces es menos de lo que pensamos.
No es necesario tener $1000 para invertir. Sin embargo, debes ser muy prudente y cauteloso si quieres emplear tu dinero en cualquiera de estas empresas, revisa las opciones y toma la que mejor te convenga, tomando en cuenta que es muy probable que al inicio las ganancias sean proporcionales a lo que has invertido. No obstante, más adelante el panorama puede cambiar beneficiándote parcialmente ganando más de lo que has invertido.
¿TE HAS PREGUNTADO SI ES NECESARIO TENER CAPITAL PARA INVERTIR?
Los mercados nunca son estáticos, las tendencias constantemente están cambiando. Lo anterior, es una desventaja tanto para el emprendedor como para el inversionista. Por tal razón, nunca de los nunca, debemos invertir todo nuestro capital en el negocio que queremos iniciar o en la empresa a la que queremos dedicar nuestro dinero. Guarda tu colchoncito, con el que podrás mantenerte en los momentos de crisis. Analiza, evalúa, y administra bien tu dinero.
Ahora, si iniciarás tu emprendimiento o inversión con endeudamiento, verifica si ese negocio podrá solventar la mensualidad o si tienes capital aparte para cubrirla, porque ¡Los bancos no perdonan! ¿Qué pasa si mi emprendimiento no está dando el ancho? ¿Qué sucede cuando he invertido y no veo ganancias? Querido y querida lectora, déjame decirte que los momentos oscuros vendrán, los años de vacas flacas se aproximarán y que cuando siembres y no veas mucha cosecha. ¡Sí! ¡Lo sé! esto puede parecer muy frustrante. Aunque los momentos de crisis pueden tornarse grandes oportunidades para innovar. Con todo lo que ha sucedido en esta pandemia, es admirable cómo muchas personas que perdieron, o hubo un stop en sus empleos, se las han ingeniado para ganar dinero y les ha ido súper bien.
Todo es cuestión de fortaleza mental, disciplina y sobre todo resiliencia, que es la capacidad para adaptarse a las situaciones adversas con resultados positivos. Es normal sentirse triste, pero nuestra actitud puede cambiarlo todo. ¡Ánimo! Las crisis pueden sacar lo mejor de nosotros, esto es la vida, si caes te levantas y si hay tormentas habrá esperanza. Si estás por iniciarte en el mundo del emprendedurismo, te sugerimos los siguientes libros que seguramente te ayudarán a crecer: “Véndele a la mente, no a la gente” de Jürgen Klaric, “El manual del emprendedor” de Steve Blank y “La vaca púrpura” de Seth Godin.
Si estás por iniciarte en el mundo del emprendedurismo, te sugerimos los siguientes libros que seguramente te ayudarán a crecer: “Véndele a la mente, no a la gente” de Jürgen Klaric, “El manual del emprendedor” de Steve Blank y “La vaca púrpura” de Seth Godin. Realmente es una gran aventura el emprender y/o invertir, te ayuda a crecer como persona y te genera otra fuente de ingreso. Y si lo harás ¡Hazlo ya! Pregunta, consulta e infórmate; y sobre todo, no olvides que el principal objetivo es generar un producto o servicio de calidad. Recordemos que somos hijos de Dios, y que por medio de nuestros negocios podemos llevar la luz de Jesús a los que más lo necesiten.
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