En más de alguna ocasión nos hemos preguntado: ¿Cuál es el tipo de belleza que le agrada a Dios? o ¿Cuál es el estándar de belleza según las Escrituras? En sí, todas tenemos diferentes perspectivas acerca de este tema, y por tal razón quiero compartirte seis aspectos que comprende una belleza incorruptible.
1. No se basa en las apariencias
1 Pedro 3:3-4 “Que la belleza de ustedes no sea la externa, que consiste en adornos tales como peinados ostentosos, joyas de oro y vestidos lujosos. Que su belleza sea más bien la incorruptible, la que procede de lo íntimo del corazón y consiste en un espíritu suave y apacible. Esta sí que tiene mucho valor delante de Dios.” Es bueno vestirse y verse linda, sin embargo, que nuestra hermosura no esté cimentada en atuendos y accesorios muy lujosos o caros. Lastimosamente, muchas mujeres gastan hasta lo que no tienen, con tal de adquirir las últimas tendencias de la moda y vemos que en realidad la belleza incorruptible es la que procede de lo íntimo del corazón. En el artículo anterior hablábamos acerca de que las emociones, intenciones y acciones vienen de nuestro interior. Hoy toma sentido aquella pregunta que hacíamos: ¿Cómo está tu corazón? Espero que, al haber dado respuesta a esa pregunta, si identificaste algo, hayas podido sanar tu corazoncito. La belleza de la que nos habla este versículo consiste en un espíritu suave y apacible, esto quiere decir que seamos mujeres pacíficas que se mantienen en un punto de equilibrio en medio de este mundo tan agitante y fatigoso; y cuya tranquilidad no equivale a timidez, sino a una actitud positiva y una calma muy bien trabajada. Mujeres que demuestren una gentileza y amabilidad sincera que las hace distintas a las demás; por ejemplo, brindar un cordial saludo o un pequeño gesto de cortesía.
Esto tiene mucho valor delante de Dios.
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