“Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho” San Juan 15:7
Humanamente nos gusta recibir y obtener las cosas que pedimos, lo que creemos necesitar. Sin embargo, Dios me dice, que para recibir respuesta a mis oraciones primero tengo que guardar sus mandamientos y hacer lo que es agradable ante sus ojos. La obediencia no es algo que la naturaleza humana elabora espontáneamente. Vale la pena obedecer, nosotros somos los que escogemos hacerlo. Cuando permanecemos en Él, nuestras peticiones estarán alineadas a su voluntad y Palabra.
¿Qué estoy esperando de Dios?
¿Están mis oraciones acordes a su voluntad?