“… el que entre ustedes quiera ser grande, deberá servir a los demás” Mateo 20:26 DHH
El deseo de grandeza es algo natural en ser humano, creo que para todos es agradable ser aplaudidos o exaltados. El ser humano procura constantemente tener poder. Sin embargo en el Reino de Dios, la grandeza nada tiene que ver con ocupar una posición de renombre o tener un reconocimiento público, sino mas bien se trata de entregarse en servicio a los demás, encontrar satisfacción mientras ayudamos a otros, anteponer las necesidades del prójimo a las propias, trabajar en pro del bien común y hacerlo con regocijo aún desde el anonimato.
“En el Reino de Dios la grandeza y el servicio son sinónimos”
¿Encuentro gozo en el servir a otros?
¿Es mi deseo de servir, más grande que mi deseo de grandeza?
¿Qué puedo hacer por los demás desde dónde estoy?