¡SIEMPRE HAY UNA RAZÓN PARA LA ALABARLE!
No permitas que tu adoración,
dependa de tu circunstancia;
no prestes tu corazón,
a cosas sin importancia.
Siempre hay una razón,
para darle gracias a Dios;
con el corazón.
No descuides con Dios tu relación,
eleva en todo tiempo;
y recibirás abundante bendición.
“Cantad alegres a Dios habitantes de toda la tierra. Servid a jehová con alegría; Venid ante su presencia con regocijo. Reconoced que jehová es Dios; Él nos hizo, y no nosotros mismos; pueblo suyo somos, y ovejas de su prado. Entran por sus puertas con acción de gracias; Por sus atrios con alabanza; alabadle, bendecid su nombre. Porque jehová es bueno; para siempre es su misericordia, y su verdad por todas las generaciones”.
(Salmos 100:1-5)